Cada 4 de abril se celebra el Día de la Empanada Salteña. Según cuenta la historia, la elección de la fecha obedece a que un 4 de abril de 1820, el entonces gobernador de Salta, Martín Miguel de Güemes tomó la decisión de asignar 29 pesos y 6 reales del presupuesto provincial para la elaboración de empanadas para recibir a las tropas que volvían de Tucumán. Aunque Argentina tiene tantas variedades de empanadas como provincias, es innegable que las salteñas ostentan fama de ser las más ricas. Fritas, jugosas, con la carne cortada a cuchillo, cada una alberga un secreto entre sus repulgues que la hace única. Dato curioso: Las empanadas salteñas llevan de 16 a 19 repulgues. Se pueden freír o cocinar en el horno. Es habitual acompañarlas con una salsita de tomate picante compuesta por ají en vaina, muy poca cebolla y sal. Todo triturado.