La panna cotta es un postre tradicional de Italia, más precisamente del Piamonte, región del norte del país europeo. Su nombre significa literalmente crema cocida. Su receta es sencilla y lleva muy pocos ingredientes: crema, azúcar y leche. Aunque hacer este postre es relativamente fácil, para lograr su característica consistencia gelatinosa, la receta tiene un secreto especial. Según los expertos, una panna cotta perfecta es aquella de textura sedosa, lisa, uniforme y consistente que no se deshace al moverla. La receta más conocida es con frutas frescas por encima o un coulis (salsa) de frutillas o frutos rojos. Pero también hay de café, caramelo, mango, chocolate o dulce de leche. Dato curioso: la frutilla es lo que identifica a la ciudad de Coronda, 300 hectáreas de frutillas con una producción de alrededor de 7 millones de kilos por año, que representan el 45% de la producción nacional. Durante el mes de noviembre tiene lugar la Fiesta Nacional de la Frutilla.
