Dorado grillado con salsa de roquefort, chupín de surubí, pacú, boga a la parrilla, palitos fritos de surubí, escabeche de pescado, incluso un ceviche de sabor criollo, entre más opciones. En un país con un consumo bajo de pescado, las provincias del litoral marcan la excepción a la regla. Santa Fe tiene 750 km de costa del río Paraná, a diferencia de la gran variedad que ofrece el mar en cuanto a pescados y mariscos, en el río sólo se encuentran dos variedades de pescados: de escama y de cuero. Pescados de cuero son, por ejemplo, el surubí, el patí, el amarillo, el manduvé, el moncholo. Y después la variedad de escama que es la boga, el dorado, el sábalo. Las diferencias radican en que el pescado de cuero tiene más grasa y es de color amarilla, en cambio la carne del pescado de escama es más sutil, con menos grasa en el medio y más blanca.