Con sabores únicos, premium, artesanales y gourmet se destacan desde salames y jamones hasta bondiolas y lomitos. A continuación algunas localidades donde poder degustar estos productos. Mercedes: es la capital nacional del salame quintero. Ubicada a 107 kilómetros de la Ciudad de Buenos Aires. A esta localidad llegaron inmigrantes italianos que dejaron el legado de esta delicia. Mercedes tiene su propia celebración: La Fiesta Nacional del Salame Quintero que se realiza cada septiembre durante tres días, con la coronación de una Reina del Salame y premiación para los productores que hacen chacinados. Tandil: es famoso por sus sierras, pero también por sus chacinados. El salame tandilense, de picado fino o grueso, es parte del patrimonio cultural de esta hermosa ciudad. Se trata de una ciudad donde la disponibilidad de materias primas en cantidad y calidad suficiente y el dominio de técnicas de elaboración artesanales lograron pasar año tras año el secreto del mejor salame. Pero allí, además se pueden disfrutar chorizos, mortadelas, pancetas, lomito, jamón crudo y quesos. Junín: con la llegada de inmigrantes italianos, esta localidad se convirtió en una zona de gran producción y comercialización de embutidos. En noviembre se celebra la Fiesta del Fiambre Casero, donde se pueden degustar además de salames, chorizos, bondiolas y jamón.
Destinos
Mercedes, Mercedes, Buenos Aires.
Tandil, Tandil, Buenos Aires.
Junín, Junín, Buenos Aires.